La salsa de tomate es un ingrediente imprescindible en la gastronomía mundial, presente en una amplia variedad de platos. Sin embargo, su sabor ácido puede generar molestias digestivas para algunas personas, especialmente aquellas con sensibilidad estomacal o problemas de acidez. Tradicionalmente, el azúcar es la elección popular para reducir esa acidez. Sin embargo, en la actualidad, muchos buscan alternativas más saludables y efectivas.
El bicarbonato de sodio es una de estas opciones. Su capacidad de neutralizar la acidez sin alterar significativamente el sabor lo convierte en una solución natural y accesible, según la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Por qué es más saludable usar bicarbonato de sodio en la salsa de tomate.
El bicarbonato de sodio se destaca por ser un producto natural y accesible que puede neutralizar la acidez de la salsa de tomate sin la necesidad de recurrir al azúcar u otros aditivos. Si bien el azúcar reduce la percepción del sabor ácido, no modifica el nivel de acidez de la salsa. El bicarbonato de sodio, en cambio, actúa directamente, neutralizándolos químicamente y logrando que el pH de la salsa se vuelva menos ácido.
